Cuando la comida no sacia el hambre, cuando el agua no calma la sed. Si la risa no es carcajada, si la sangre no es lo bastante encarnada. Porque el listón es demasiado bajo, porque la desidia quizás muy alta.
Todo es nada, nada es siempre poco. No hay bastantes nubes en el cielo para tapar el sol, no llega bien la luz a través del balcón. El mar quiere barcos, la montaña que caminen sus campos.
La tierra fértil no da frutos, el oasis no alivia al viajero. Mariposas sin color, un pastel sin guinda. Mañana nunca llega, hoy se escapa dejándo las manos vacías. Andando no se cruza la meta, si corriendo, se pierde el atleta.
Hace frío y el fuego no arde suficiente. Una ostra sin perla, un trébol de tres hojas, un macho sin simiente. Corazón con muescas solo lo abre llave maestra.
Cuando no se llega al cinco, siempre es insuficiente.
