"Porque a veces necesitamos remendar y otras, simplemente, encontrar ese botón que creiamos perdido"

lunes, 1 de marzo de 2010

CONTINENTE Y CONTENIDO

Los envoltorios no siempre son correspondientes con el objeto que guardan en su interior; a veces, un papel brillante, puede confundir nuestra percepción acerca del elemento en cuestión.
Una piel de plátano perfectamente amarilla por fuera, no siempre alberga un fruto maduro de néctar exquisito. El perfume más intenso tiene cabida en muchos frascos. La presentación es muy buena pero carente de sentido. Lo que el espejo refleja no es lo único que ha de ser visto.
Encima de la mesa, un jarrón artísticamente tallado, las flores que contiene son de pétalos marchitados. A cincel un rostro magníficamente esculpido, mas si miro a sus ojos, me caigo en un inmenso vacío.
Es difícil la tarea de perderse en el universo, pero sólo contemplando las estrellas, no alcanzaremos el conocimiento. Si el bosque es frondoso y las hojas no las arrulla el viento, si la hierba es fresca pero no sirve de alimento, no es suficiente para impresionar al viajero.
Y te has perdido en los detalles, te has ensimismado en lo perfecto. He buceado en las profundidades sin olvidarme de los gestos. El continente era el magnífico engaño, el contenido ha demostrado estar falto de sentido.