"Porque a veces necesitamos remendar y otras, simplemente, encontrar ese botón que creiamos perdido"

miércoles, 21 de abril de 2010

SILENCIO

Y en medio del torbellino de voces, de recuerdos, sentimientos, personas.... En medio de una vorágine cada vez más caótica, dejé de escuchar.
Exigentes creadores, difícil sucesor, perturbado anexo, murciélagos que vuelan a mi alrededor. Ni murmullos ni chillidos, ni palabras ni sonidos. Sólo calma y no tempestad. Sola en la inmensidad del mar: ó me ahogo ó aprendo a navegar. Y con mano temblorosa agarro la pala y empiezo a remar, está lejos tierra firme pero la puedo divisar.
Voy tirando lastres que no necesito, que tampoco quiero anclas que me fijen en un mismo lugar. Peces que muerden el anzuelo, buzos que se tiran sin oxígeno, sirenas de canto imposible, desesperadas, no dejan de gritar. Lo que suena no hace ruido, oigo notas mudas de una canción.
Hay una paz inconfundible en la calma que otorga el dolor, sólo la percibe quién presta atención. Ignorantes los que no saben escuchar el clamor de un silencio. Un rugido sordo desgarrando los tímpanos del oyente sabio.
En la ausencia de palabras, la verdad.